24/7 DIA INTERNACIONAL DE LA LIBERTAD DE SENTIR Y VIVIR DE ACUERDO A NUESTRA PERSONALIDAD
El 24 de julio se celebra el Día Internacional del BDSM. Todos los que accedéis a esta web sabéis en qué consiste esta práctica. Para los que vivimos el BDSM como un estilo de vida es un día para reivindicar el derecho, tanto de quienes se sienten dominantes como sumisos, de desarrollar con libertad y respeto nuestras tendencias y fantasías. Un día para exigir que se respete el derecho a vivir en plenitud y sin restricciones todas las muy variadas personalidades que se integran en el mundo de la dominación y sumisión.
El BDSM es una forma de vida que quienes lo sienten auténticamente lo respiran las 24 horas del día. Yo he tenido un carácter dominante desde que tengo uso de razón toda mi vida y desde muy temprano advertí mi tendencia a organizar mi vida según me dictaban mis deseos e intereses. De inmediato comprobé mi extraordinaria capacidad para conseguir siempre mis objetivos, para manipular a los demás según mis intereses y como las personas de mi entorno aceptaban de buen grado someterse a mis instrucciones. Desde entonces el BDSM me ha producido una doble satisfacción: por un lado, ser capaz de imponer a los demás mis deseos y caprichos y, por otro, observar la felicidad que genera en las otras personas obedecer y dejarse tutelar por una persona tan poderosa como Yo.
Sé perfectamente que el dominio que ejerzo sobre los demás obedece tanto a mi excepcional físico, que cautiva a quien lo observan derribando cualquier posible resistencia inicial, como a mi aguda inteligencia que me permite conocer con facilidad las necesidades y debilidades de los otros para aprovecharme de ellas en mi beneficio pero, al mismo tiempo, para posibilitarles que encuentren su destino en este planeta. En el mundo de la Dominación/Sumisión cada uno debe tener perfectamente marcado sus roles, en función de su naturaleza y capacidades, y las relaciones deben siempre desarrollarse sin violencia ni discriminación de ningún tipo, de forma consensuada y respetando los derechos de cada persona. De esta manera, la relación será siempre satisfactoria para todos los participantes y cada uno podrá encontrar aquello que necesita. En mi caso, Yo lo tengo claro. Me gusta tener sumisos, cuantos más mejor, que sean conscientes de que su felicidad depende de su obediencia y fidelidad a MI, de su absoluta dependencia y de la necesidad de que me entreguen completamente su vida, sin secretos ni temores, para que del control que mis sumisos necesitan que ejerza sobre ellos, pueda obtener Yo la máxima satisfacción y, de ese modo, ellos puedan ver también cumplidas sus ansias de servir.
Como persona dominante las 24 horas del día, ejerzo este rol en todos los momentos de mi vida. En sesión y fuera de ella, con las personas más cercanas y con los extraños. Me produce una satisfacción especial ver como doblego la resistencia de todos aquellos que se niegan en principio a cumplir mis instrucciones y terminan aceptando sumisamente mis órdenes sin rechistar. Como persona dominante, cruel y malvada me gusta llevar al límite la docilidad de mis sumisos, ponerles cada día nuevos desafíos y ver como sufren para superarlos. Pero me gusta también premiarlos cuando lo consiguen. Aunque puedes estar seguro que pocos son quienes lo consiguen , ¿te atreves a probar?
Arrodillate. Te voy a explicar lo que eres para mi.
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