A LA DERIVA EN MANOS DE JESSYCA BENTLEY
Todo el día en braguitas por casa. Ando de allá para acá, sintiéndome chica, sintiéndome chacha y sintiéndome chocho. En braguitas y con una camiseta de tirantitos o alguna prenda sexy y cómoda deambulo como una locaza por mi hogar, en nuestra intimidad, transformada en mujer. Y digo nuestra porque desde la primera vez que hablé con la Ama Jessy Bentley, siento que mi mariposón piso también está habitado por Ella, que allí vivimos un poco las dos. Hemos compartido varias sesiones telefónicas, a cual más emocional y vibrante, tras las que se ha apoderado de mi completamente. Me siento invadida y violada por esa voz cada día, aunque no pueda hablarla más que una vez a la semana. Solo soy una más de su creciente Harem en expansión, lleno de putas con necesidad de su Ama, decenas de concubinas dispuestas para ser tomadas el día que las toca, guardando cola como prostitutas en el Malecon. Pero aunque solo un día a la semana me bendiga los oídos con su voz cercana y fresca, yo me siento poseída desde que me levanto. Cada día mas sumisa, y cada día más zorra. Pervertidísima. Vivo a merced de su lascivia, hechizada de lujuria por su poder cordial. No ha tenido que ordenarme nada para que yo entre en su red convertida en devota.
Yo al femdomnismo ya estaba muy pero que muy requeteapuntada, pero ahora lo estoy al bentleysmo – dícese del fervor incontrolable que la población kinky siente por la Diva Dominante Jessy Bentley- y lo disfruto como una perra, con o sin dildo.
Siguiendo sus instrucciones, cada día voy al trabajo con braguitas, debiendo enviarla una foto de exhibición y comprobación. Mis uñas de los pies pintadas de rosa por orden suya, unas sandalias con cuña y abiertas dejan ver el color femenino desde que cruzo el umbral, casi siempre ya medio excitada. Una diadema para recoger mi pelo –cada día mas largo, soñando con una melenaza, como la de Ella- y un poco de perfume me meten definitivamente en situación, y unos pasitos cortos que mueven mi culito con toda la pluma de la reserva Cheyenne, maricona perdida, por cada rincón de mi hogar, en la que ya no hay ningún chico porque me he ido de mi mismo, y ya solo hay mujer en mi cuerpo y en mi alma. Y soy un alma en pene desde que me siento y pongo Cosmopolitan en la tele. Un alma en pene y sin pene ni gloria a la vez. Quiero decir, que en cuanto pongo el culo en el sofá y me penetro con un dilatador, mi polla deja de existir. Es delicioso estar así cuando Ella está a la otra línea del teléfono.
Mis tetitas se desarrollan, al menos yo las siento así. Como disfrutaría teniendo un buen par de tetas…con pezones grandes, rosados, perforados y anillados. Dos tetas de verdad, que pudieran ser manejadas por Ella a su capricho, para ser torturadas, , o para ser amasadas por un cliente que Ella elija, o lamidas por cualquiera, quizás un inmigrante enorme y hambriento que seleccionara de la calle con Su perverso criterio.
Me maneja como quiere. Eso me pone cachonda, me da una energía que yo no tenía desde mi despertar sexual. Me siento en una nueva pubertad, transformada en chica. Que vendrá ahora, que futuro me espera…
vanessa princess.
¿Quieres ser mi sumiso?…
¿Te ofreces para cumplir mis caprichos contigo?…
Dirigete a mi, con mucho respeto, de una de las siguientes maneras:
Mail: Jessy_bentley@yahoo.com
Twitter: https://twitter.com/Jessy_Bentley
803 477 028
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